domingo, 24 de enero de 2010

PRÁCTICA CANON - Sonia Marqués Titos

1. Principios sobre los que se fundamenta el canon de uno de los grupos de vasijas.

Como principio básico cabe destacar que todas las vasijas siguen unas mismas proporciones, estando todas ellas inscritas en un cuadrado.
A su vez podemos observar que todas están formadas por los mismos elementos básicos: una base, de menor tamaño que la anchura total del elemento; un cuerpo, cuya forma sigue las mismas líneas en todas ellas; unas asas, para facilitar el manejo de la vasija; y la ausencia de tapa.
Por último, decir que todas ellas participan también del principio de simetría.


2. Análisis gráfico según los pitagóricos del objeto “lata de cocacola”.

Para los Pitagóricos, la belleza viene definida por leyes matemáticas, tales como la simetría o el orden, este último entendido como el resultado perfecto de una serie de números bien conjugados. Cualquier cosa desordenada o asimétrica era considerada como fea.
La “lata de cocacola” es un objeto de proporciones estudiadas, siendo su altura el doble de su anchura, lo que le da estabilidad y orden; a su vez presenta una simetría completa, aportando con ella un gran equilibrio al elemento en si. Por estas características, desde el punto de vista de los pitagóricos, la “lata de cocacola” sería un objeto bello, ya que sus principios básicos, están basados en el concepto de belleza explicado anteriormente.




3. Principios que definen a un grupo de objetos actuales entendidos como pertenecientes a un mismo canon.

Para este apartado he elegido una serie de objetos diseñados por Eero Saarinen.
El canon o los principios básicos seguidos para su diseño han sido:

-El uso de líneas curvas.

-Formas suaves que generan calma y orden.

-Colores lisos.

-Y por último, formas simétricas, que le aportan estabilidad y equilibrio al objeto.


Práctica Canon. Iria Varela Parafita

1. Principios sobre los que se fundamenta el canon del grupo de vasijas


Este conjunto de vasijas siguen unos parámetros formales similares que constituyen su canon de belleza.

Todas ellas se encuentran inscritas en un rectángulo. Su estructura se compone de tres partes diferenciadas: una base, que también se puede inscribir en un rectángulo de ancho variable, pero siempre inferior a la anchura máxima; una zona de ensanchamiento, desde la base hasta la mitad o ¾ de la altura de la vasija, donde esta alcanza su amplitud máxima; y una última parte en la que la vasija vuelve a estrecharse.

Se podría dividir la estructura de todas las vasijas como la unión de 2 triángulos inversos.


2. Análisis gráfico según los pitagóricos de la “lata de coca-cola”

Para los pitagóricos, todos los objetos y elementos se basan en los números. Las proporciones y simetrías son los pilares y fundamentos de la belleza, y sin ellas nada puede ser estético.

La lata de Coca-cola es un objeto completamente simétrico, tanto vertical como horizontalmente. Es un cilindro de base circular, donde el diámetro de la base es la mitad de la altura. Con esto se demuestra que tiene unas proporciones claras y estudiadas, por lo que sigue los principios enunciados por Pitágoras y sus seguidores.


3. Principios que definen el canon de los juegos de café de Ritzenhoff

Los principios básicos que siguen tanto las tazas, cómo los azucareros y las jarras de leche, son, el uso de líneas redondeadas y los colores vivos.

Además, buscan en todo momento la armonía entre las partes que componen cada uno de los objetos, e incluso el embalaje, conviertiendolos en una especie de puzzle, que muestra el conjunto final.





http://www.ritzenhoff.de/

miércoles, 20 de enero de 2010

El papel de la escala en los procesos de diseño











Las imágenes que hemos adjuntado en esta entrada, se centran en el recurso del cambio de escala para variar los objetivos del diseño. En ellas se observa la convivencia de las escalas definidas por Moore, la escala miniatura, la superescala, la escala monumental y la más famosa, la escala humana.
El aumento o disminución de la escala de un objeto se utiliza frecuentemente para captar la atención del usuario, e indicarle a su vez, un cambio en su significado original.





miércoles, 13 de enero de 2010

The Ant. Análisis según los puntos de Bruno Munari

Nombre del objeto: The Ant Chair. Modelo 3100

Autor: Arne Jacobsen. 1952

Productor: Fritz Hansen.

Dimensiones: 480x480x770 mm. A pesar de que estas son las medidas originales, hoy en día podemos adquirirla en tres tamaños diferentes.

Peso: ± 2 kg.

Material: El diseño consta de dos únicas partes: un asiento-respaldo de contrachapado curvado y un armazón metálico de acero de tres patas. La silla original se produjo en Teca, la madera más común en los diseños daneses de los años 50.

Acabados: La empresa Hansen distribuye la silla en 6 acabados distintos: lacado, haya pintada (semi lacado), ceniza coloreada, arce, haya y roble oscurecido. Las patas tienen un acabado cromado.

Técnicas: Jacobsen no inventó técnicas nuevas o modos diferentes de procesar la madera, por lo que la técnica principal de construcción de la silla es el torneado. En cuanto a la elaboración de las patas, estas han sido realizadas con acero forjado. La unión entre el trípode de soporte y el asiento se asegura por una junta central y por tres tacos de goma.

Coste: Dependiendo de el acabado el precio oscila entre los 390€ y los 441€, si la adquirimos en el distribuidor original. No obstante podemos encontrar ejemplares de esta silla a precios más económicos.

Embalaje: No es significativo.

Utilidad declarada: Silla de tres patas.

Funcionalidad: Proporcionar asiento.

Ruido: El objeto en sí no produce ruidos, aun así se le han incorporado unos tacos de goma a cada una de las patas para evitar sonidos desagradables al ser arrastrada.

Mantenimiento: Para una buena conservación se debe mantener alejada de elementos inflamables, no utilizar productos de limpieza abrasivos, y seguir en todo momento las instrucciones de limpieza facilitadas por el fabricante.

Ergonomía: La sección reducida del contrachapado mejora la elasticidad del soporte. Con el fin de mejorar la ergonomía de la silla Jacobsen creó un nuevo modelo, el 3107.

Manejabilidad: Altamente manejable debido a sus dimensiones y su peso.

Duración: Ilimitada.

Toxicidad: No presenta.

Estética: Sus formas redondeadas recuerdan las del cuerpo de una hormiga. La innovación de la propuesta consiste en redondear el contrachapado hasta darle aspecto de caderas y rebajarlo en el centro a modo de cintura.

Moda: Se trata de un elemento adecuado para cualquier época.

Valor social: Al tratarse de una silla producida en serie trataba de ser accesible a todos los públicos.

Esenciabilidad: Carece de elementos decorativos.

Precedentes: Otros muebles de madera contrachapada, cómo las sillas de Alvar Aalto o Marcel Breuer.

Aceptación por parte del público: Muy elevada.